Alfarera oriunda de la localidad de Santa Cruz de Cuca, nació el 19 de diciembre de 1959. Rodeada de la tradición alfarera, comenzó su historia en la greda en su juventud, a los 17 años, teniendo como referente de enseñanza a su madre, Prosperina Sepúlveda, lo que ratifica que esta técnica artesanal se aprende sobre todo en los espacios cotidianos dentro de la familia. Sin embargo, evidenciando el sentido de comunidad que tiene este arte, también recibió saberes y técnicas sobre la elaboración de las diferentes piezas de sus vecinas Orfelina Vielma y Mercedes Sandoval. Ha elegido el camino de las piezas utilitarias, que tienen gran reconocimiento por su funcionalidad y las bondades de la greda, considerando elementos como platos junto a azafates con tapa y sin tapa.